El reciclaje de materias plásticas se rige por estándares rígidos que imponen normas severas para garantizar un material homogéneo y limpio para iniciar el proceso de transformación.
Entre las obligaciones impuestas, que tienen como objetivo añadir valor al material procesado y al relativo material triturado resultante:
- tamaño homogéneo,
- separación de las fracciones metálicas,
- lavado y uniformidad de categoría.